“Hoy competir con un producto o un precio es fácil, la diferencia está en el servicio”, afirmó Michaut, invitando a los comerciantes a pensar en el marketing de las emociones, la experiencia del cliente y el valor humano como pilares fundamentales para fidelizar y posicionar una marca.
Durante la jornada, se abordaron temas como el uso estratégico de recursos dentro del local (vidrieras, iluminación, atención, procesos de entrega), la capacitación del personal y la importancia de conectar desde lo emocional, especialmente en un contexto atravesado por lo digital.
“La digitalización llegó para quedarse, pero la emoción no se reemplaza. Un cliente puede comprar online, pero lo que recordará es cómo lo trataste, cómo lo hiciste sentir”, expresó la disertante.
Este primer taller busca dar un pantallazo inicial sobre la importancia del servicio como diferencial competitivo. Desde el Centro Comercial adelantaron que están abiertos a repetir la experiencia o profundizarla con nuevos encuentros prácticos, según la demanda del sector.
Servicio. Conexión. Experiencia. El futuro del comercio sigue siendo profundamente humano.
